Y el mundo se cansó, de los Miles de años de excesos y desperdicios que le dimos, de la irremediable naturalidad cruel y destructiva del ser humano. Devolviendo lo que le hicimos en un solo tramo de destrucción y muerte, la ira de él expresada hacia nosotros, que nunca lo dejamos en paz y seguimos matándolo, siempre pensando que nada acaba. Es tiempo de darnos cuenta de que no sólo estamos en mi mundo, sino en este mundo del cual nadie es dueño, ya que sólo somos una pequeña parte de la inmensidad que lo abarca. Hay que cuidarlo y ser condescendientes entre todos, ya que en la rápida confusión no llegamos a mirar con los verdaderos ojos del subconsciente, los de la mente. Lo que no nos permite darnos cuenta que estamos en la mira de todos los que nos quieren ver siempre atrás, opacados y serenos, mirando callados al suelo, sin levantar la vista y mirar más allá, tapando todo lo que nos rodea.
Aprender a estar en perfecta sintonía con nuestro propio ser sin olvidar nuestra oscura e incierta procedencia. Que no es nada más que nuestra propia realidad, algo imaginario, consciente e inconsciente, dependiendo de lo que cada uno quiera conocer sin perder su control y no dejarse llevar hacia nuestra propia putrefacción, nuestro irremediable fin.
No encerrarnos en una caja china y mantenernos rodeados de lo que cada uno estima, no dejarse llevar por la propia autodestrucción, fraternizar con nuestra bronca, resistiendo en pie contra todo lo que nos quiere derribar en esta gran Biosfera Mental dada por todo lo que nos quieren imponer. Haciéndonos creer que nos representa, o de lo contrario sólo podremos correr una vez más y arrodillarnos en un charco denso de nuestra propia, triste ignorancia y llorar, suplicando al más grande de todos los árboles negros. La representación de nuestra sangre perdida, de las falsas epifanías las cuales son impuestas por ellos. Y de la muerte de todo lo que somos y representamos. Porque en ese momento vamos a ser menos que el recuerdo disuelto de una mente perdida y descarriada.
credits
released May 29, 2018
BioMental es:
Fernando Santos – Voz
Luciano Cogo – Bajo y segunda voz
Karim Benegas – Guitarra y coros
Facundo Giuffrida – Batería
“Oscuridad y Putrefacción” fue enteramente grabado en: Estudio Apache, Estudio 505, Estudio
Lirón y La Boheme Estudio por:
- BioMental
- Sebastián Cardero – Drum Doctor (Temas: IRA, CONTROL/DESTROY, CAJA CHINA, EN MI MUNDO, EN LA MIRA, RESISTE, ÁRBOL NEGRO)
- Facundo Giuffrida – Drum Doctor (Temas: BIOMENTAL, OSCPUT e INTROS)
- Sufián Cantilo – Grabación (Estudio Lirón)
- Karim Benegas – Grabación (Estudio Apache & La Boheme Sala de ensayo y grabación)
- Gaspar Benegas – Grabación (Estudio Apache)
- Francisco Márquez- Grabación (Estudio 505)
Edición a cargo de Karim Benegas
Mezcla y Mastering a cargo de Gaspar Benegas y Axel Lang en “Estudio Calle Mármol”
Agradecemos tanto a todas aquellas personas que desde un principio abrieron sus mentes a estar de acuerdo con lo que nos representa y acompañarnos a través de los años desde nuestro nacimiento y además a aquellos que se acercaron a nosotros luego del trágico suceso que nos ocurrió, no solamente apoyándonos, sino también aportando a nuestro proyecto y a nuestro sueño con las propuestas suficientes para que ésto no decaiga, siga subiendo y creciendo cada vez más, ésto que recién comienza, ésto, que es BIOMENTAL.
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